El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este martes en la Casa Blanca que el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) será renegociado “muy pronto”, alegando que sus socios no han respetado el acuerdo. Durante un encuentro con el primer ministro canadiense, Mark Carney, Trump calificó al tratado como «muy efectivo», aunque lo consideró solo un “paso de transición” y advirtió que “la gente tiene que respetarlo”.
El T-MEC, vigente desde 2020, contempla una revisión obligatoria en julio de 2026, conforme al artículo 34.7 del tratado. Dicha cláusula establece que los países deberán evaluar el funcionamiento del acuerdo y declarar si desean extenderlo por otros 16 años. En caso de desacuerdo, se llevaría a cabo una revisión anual hasta llegar a una decisión definitiva.
Carney acudió a la Casa Blanca con la intención de fortalecer las relaciones bilaterales con Estados Unidos y discutir los aranceles impuestos por Trump a productos canadienses, particularmente del sector automotriz. Sin embargo, el presidente estadounidense reiteró que no tiene intención de retirar las tarifas y afirmó que “queremos fabricar nuestros propios coches. No queremos coches de Canadá”.
En un tono provocador, Trump incluso volvió a sugerir que Canadá podría convertirse en el estado número 51 de la Unión Americana. “Nunca digas nunca”, comentó. Carney rechazó categóricamente la insinuación: “He hablado con los propietarios de Canadá en los últimos meses, y no está a la venta, nunca lo estará”.
El mandatario estadounidense también enfatizó que aunque el T-MEC ha sido beneficioso, la falta de cumplimiento por parte de sus socios hace necesaria una revisión para “ajustarlo o terminarlo”. Trump insistió en que la renegociación ocurrirá próximamente, al igual que durante su primer mandato.
Carney, por su parte, reconoció que algunas cosas “van a cambiar”, pero defendió el acuerdo como “la base para una negociación más amplia”.