Con el inicio de la temporada de calor que en gran parte de Coahuila rebasa 40 grados centígrados, la Secretaría de Educación se prepara para tomar decisiones sobre la suspensión de clases en caso que la temperatura rebase 37 grados centígrados representando un riesgo para la salud de los estudiantes y personal educativo.
El subsecretario de Educación Básica, Jorge Alberto Salcido Portillo, anunció que estas medidas buscan proteger a los 633 mil alumnos y 52 mil docentes de Coahuila cuando se presenten olas de calor extremo.
«Al igual que en invierno con el frío extremo, aplicaremos medidas escalonadas que pueden incluir recorte de horarios en turnos matutino y vespertino», explicó el funcionario estatal.
Destacó que muchas de las escuelas han mejorado significativamente su infraestructura, con la instalación de sistemas de aire acondicionado como los mini splits, lo que ayudará a mitigar los efectos del calor durante las clases presenciales. Sin embargo, aclaró que las clases al aire libre, como las de educación física, se suspenderán si las temperaturas son demasiado altas.