Por tercer día consecutivo, el alcalde de Piedras Negras, Jacobo Rodríguez, mostró claros signos de intolerancia ante la crítica, respondiendo con gritos a señalamientos incómodos durante la sesión de cabildo.
El regidor Juan Carlos Álvarez cuestionó el pago de más de 600 mil pesos a la empresa de transporte Río Grande, de la que es socio Ricardo Valdés, cercano amigo del alcalde. Álvarez reprochó a Rodríguez por contradecir los principios de la Cuarta Transformación, cuyo decálogo establece: “No al amiguismo, no al influyentismo”.
Lejos de ofrecer una respuesta clara, el alcalde reaccionó con enojo e interrumpió a gritos la intervención del regidor, en un claro acto de autoritarismo.
Álvarez también señaló que la empresa de Valdés ha estado facturando con el Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (Simas), pero Jacobo Rodríguez se deslindó del tema y respondió que esa pregunta se la debería hacer a Lorenzo Menera.