Varios estados del país han comenzado a implementar o discutir medidas para prohibir la música y los espectáculos que promuevan la apología del delito, con estas disposiciones buscan proteger a las nuevas generaciones de la normalización de actos delictivos.
El pasado 10 de abril, el Gobierno de Querétaro anunció que firmó un acuerdo con los 18 municipios del estado para conformar un frente común contra la violencia. Como parte de este compromiso, se prohibirán eventos públicos y masivos que incluyan música asociada a la glorificación del crimen o la misoginia. “Por encima de la tranquilidad de los queretanos, ningún negocio, ningún elenco, ningún artista”, declaró el secretario de Gobierno, Carlos Alberto Alcaraz Gutiérrez.
De manera paralela, el Gobierno de Jalisco presentó una iniciativa ante el Congreso estatal que busca negar licencias municipales a agrupaciones que fomenten contenidos violentos. El legislador Salvador Zamora explicó que también se promoverán sanciones administrativas y se informará al Ministerio Público si se configura algún delito.
En Nayarit, desde el 4 de febrero está vigente un decreto que prohíbe la interpretación o reproducción pública de géneros como corridos tumbados, bélicos, progresivos o cualquier otra música que promueva la violencia. Las sanciones pueden incluir la suspensión de eventos o la revocación de permisos.
Aguascalientes, Chihuahua, Baja California, Guanajuato y recientemente Michoacán han presentado iniciativas o ya cuentan con reglamentos que prohíben este tipo de contenidos. En Michoacán, el secretario de Gobierno, Carlos Torres Piña, señaló que incluso eventos como peleas de gallos o el reparto de bienes por parte de grupos delictivos podrían ser considerados apología del delito.
El Estado de México también se ha sumado con acciones concretas. La Secretaría de Seguridad anunció la apertura de investigaciones contra artistas que promuevan a líderes del narcotráfico en ferias municipales, especialmente en Texcoco, Metepec y Tejupilco. Se exhortó a las autoridades locales a vigilar desde la contratación hasta el desarrollo de las presentaciones. En caso de violar la norma, podrían enfrentarse a sanciones penales de hasta seis meses de prisión o multas.
Un caso reciente fue el del cantante Luis R. Conriquez, quien durante su presentación en la Feria del Caballo en Texcoco anunció que no interpretaría narcocorridos. La decisión provocó la molestia del público, que respondió con abucheos y lanzando objetos al escenario.
Desde la Ciudad de México, la diputada panista Laura Álvarez exhortó a las autoridades a aplicar el artículo 208 del Código Penal Federal, que sanciona con uno a seis años de prisión a quien incurra en apología del delito. Subrayó que estas medidas no buscan limitar la libertad de expresión, sino evitar la normalización de la violencia entre las nuevas generaciones.