Una avioneta tipo Cessna 172 que volaba de Apodaca, Nuevo León, con destino a Chihuahua, se estrelló en la Sierra de La Purísima, en el municipio de Castaños, Coahuila, presuntamente a causa de las severas condiciones climáticas que imperaban en la zona. La aeronave, que transportaba al piloto y a un pasajero, quedó completamente destruida, y ambos ocupantes fallecieron en el lugar del accidente.
El piloto fue identificado como Abraham Wiebe Miller, originario de Chihuahua. Según informes del Aeropuerto del Norte, la avioneta despegó sin pasajeros adicionales, aunque algunas fuentes señalan la posibilidad de que hubiera una segunda víctima, lo cual aún no ha sido confirmado oficialmente.
La última señal de la aeronave se registró alrededor de las 14:00 horas del viernes, momento en que se perdió contacto mientras sobrevolaba el ejido Dolores, en la sierra coahuilense. Más tarde, aproximadamente a las 16:00 horas, se reportó su caída, lo que activó un operativo de búsqueda en la zona.
Elementos del 105 Batallón de Infantería, la Agencia de Investigación Criminal y la Armada de México participaron en las labores de rastreo, tanto por tierra como por aire. Sin embargo, las fuertes lluvias, el viento y lo agreste del terreno han dificultado significativamente el acceso al sitio del impacto y han retrasado la recuperación de los restos.
Un helicóptero de la Armada logró ubicar el lugar del siniestro desde el aire, aunque no pudo descender para realizar el rescate. Por tierra, las brigadas avanzan con lentitud en medio de un terreno escarpado y complicado.
La Fiscalía del Estado de Coahuila y la Dirección General de Aeronáutica Civil ya han abierto una carpeta de investigación para esclarecer las causas del accidente. Las autoridades no han descartado ninguna línea de investigación, aunque las condiciones meteorológicas adversas figuran como la principal hipótesis.